Hola a todos, hoy vamos a hablar sobre las caries.  Hemos decidido tratar este tema, puesto que hoy en día se considera una de las enfermedades más comunes en las personas de todo el mundo.

La caries dental es la destrucción de los tejidos duros de los clientes. Esta causada por la presencia de ácidos producidos por las bacterias de la placa depositada en las superficies dentales. Las piezas dentales que se ven afectadas por las caries suelen perforarse de forma paulatina, y producen dolor si dicha infección llega al nervio de la pieza dental.

Este deterioro de los dientes esta muy influenciado por el estilo de vida, es decir, influye lo que comemos, la forma en que nos cuidamos los dientes (nuestros hábitos de higiene), la presencia de flúor en el agua y la crema dental que utilizamos. La herencia también juega un papel importante en la susceptibilidad de sus dientes a la caries.

Existen varios tipos de caires, y son los siguientes:

  • Caries de corona. Se caracterizan por afectar a la parte superior del diente. Son las mas comunes y sobre todo suelen aparecer en niño.
  • Caries interproximales o interdentales. Estas se forman entre los dientes y son difíciles de detectar.
  • Caries radicular. Se forman en la línea de las encías.
  • Caries recurrentes o secundarias. Estas aparecen alrededor de los bordes de las coronas, fundas o empastes que se han colocada anteriormente como tratamiento para otra caries.

Casi toda la población, en algún momento de su vida a sufrido de caries, pero aun así los dos síntomas más comunes y que pueden despertar la luz de alarma son el dolor de muela, sobre todo al ingerir bebidas, comidas dulces, fríos o calientes. Y por último, en alguna inspección a la hora de lavarse los dientes, ver que hay agujeros visibles en los dientes.

A continuación, os vamos a exponer varios consejos para prevenir las caries.

  • Cepillarse los dientes por lo menos tres veces al día, después de cada comida.
  • Utilizar hilo dental diariamente para eliminar la placa depositada entre los dientes y debajo de la encía.
  • Acudir al dentista de forma periódica. Esto siempre puede ayudar a evitar futuras complicaciones.
  • Llevar una dieta equilibrada, evitando almidones y azúcares.

Con todo esto, os invitamos a que acudáis a los profesionales en caso de que notéis molestias y antes de notarlas, para realizaros revisiones periódicas con el objetivo de evitar posibles complicaciones.

¡Esperamos que os haya gustado!

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